NIMIEDADES

Lo primero, disculpas por mis faltas de estos días. Unas han estado más justificadas que otras.

Lo segundo, es que por lo que he podido observar, parece que hemos caido un poco en el desánimo y ya nos estamos olvidando, de por qué hacemos esto.

Desgraciadamente, algunas veces tienen que pasar cosas no muy buenas para darte cuenta de ciertas nimiedades.

Ayer perdí a un gran compañero y amigo. No pretendo que esto se convierta en una sección de esquelas. Mi objetivo es mostrar lo que te pueden enseñar ciertas situaciones.

Como homenaje, voy a colgar una cosilla que le he/me he escrito, y de la que creo que se puede sacar algo:


Hoy veo el sol gris. No es un día alegre.
He perdido a un maestro, un compañero... a un amigo.

Ahora lo único que sé, es que estamos de paso y dependiendo del viento que sople, nuestras vidas se mecen hacia un lado u otro.

Escuché en estos días, que “hay algunas cosas que no se pueden cambiar”, pero hay otras muchas que si podemos moldear, para ser lo más felices y consecuentes en el poco tiempo que circulamos por la existencia.

Qué graciosa palabra... existencia.
Cuando pienso en estas situaciones, y veo las parafernalias, todo el “cartón-piedra” que las rodea, me embargan sensaciones de tristeza, ausencia, injusticia, rabia... y esperanza.

¿Existencia? Qué leve es la carcasa material, no es nada... pero qué grande es fabricar un legado, eso si es vivir. Y eso es lo que ha dejado mi amigo Fran.

Porque cuando miro a mi alrededor, veo a mucha gente. Mucha gente a la que has llegado, de uno u otro modo, por la que sigues estando entre nosotros... para siempre.

Mucha gente y muchas cosas, marcadas por tu impronta.

Y un consejo para todos los que nos quedamos, marchando en el camino, aprendiendo cada día de personas como él.

Vive la vida al máximo, exprímela y vuélcate en tus ilusiones. Piensa en tu legado y fabrícalo cada día. No caigas en espirales absurdas, provocadas por nimiedades. Disfruta, porque todo tiene solución menos una cosa... y nunca sabemos cuando va a llegar.

Me enorgullezco de haber estado bajo tu influencia, amigo.

Un beso a tod@s y un brindis por ti, grande Fran.

Nos vemos, porque... mañana será otro día
Dan.




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